En este post, quería contarles un poco acerca de cómo administrar adecuadamente el costo de oportunidad. Pero a que se refiere el costo de oportunidad?, se podría resumir como el costo asociado a la acción de optar por realizar algo en detrimento de otra cosa . Esta es una situación a la que los seres humanos, nos enfrentamos frecuentemente, y muchas veces, estas decisiones, conllevan un costo tangible o intangible muy alto, que habitualmente no es tomado en consideración, al momento de tomarlas.
Una vez más, como es muy común en los posts de este blog, esta aplicación es válida tanto para las inversiones financieras como para la vida diaria; por ello, es mi intención compartir con ustedes algunos ejemplos de cómo el administrar incorrectamente el costo de oportunidad, nos puede llevar a situaciones realmente inesperadas.
En el ámbito de las inversiones en valores, es muy común escuchar que analistas recomiendan comprar una determinada acción o índice y hacer hold de la misma con la firme intención de realizar una ganancia, es más, nos recomiendan permanecer en bolsa por un período muy largo de tiempo con la esperanza de maximizar los beneficios asociados a la inversión. Esto, desde luego, puede que sea una estrategia exitosa pero incluso al serlo oculta un costo de oportunidad que los inversionistas pocas veces toman en cuenta para decidir el tiempo de la inversión o las alternativas que tienen mientras mantienen dicha inversión. Por ejemplo, digamos que un índice bursátil se ha duplicado en los últimos 5 años, y un inversionista de riesgo moderado, decide comprar un ETF (Exchange traded fund) que replique tal índice, con una inversión inicial de USD 10,000 y suponemos que permanece los 5 años, cuando decide venderlo por USD 20,000 y realizar la ganancia de USD 10,000. Hasta este punto, todo fenomenal porque entendemos intuitivamente que ganar un 20% nominal al año, está muy por encima de lo que puede pagar un activo libre de riesgo, pero no se han tomado en cuenta dos riesgos muy importantes, uno el riesgo de reprecio y el otro el costo de oportunidad asociado. El primero representa el riesgo de que esos USD 20,000 cobrados, no tengan una inversión interesante o clara en el corto plazo en el ámbito bursátil por cuanto, dicho índice, al haber subido tanto, probablemente haya perdido atractivo para los inversionistas, con lo cual, podemos deducir que dicho inversionista con la intención de asegurar sus retornos, pondrá esos USD 20,000 en un instrumento de renta fija de baja rentabilidad mientras decide que otras inversiones hacer, entonces, pasaría de tener una rentabilidad de 20% anual a tener un 2% anual aproximadamente, una caída dramática, no es así?. Por otro lado, está el costo de oportunidad, porque es casi seguro que en dicho período de tiempo, para que el índice haya duplicado su valor, los valores que lo representan, deben haberse movido en muchos casos por encima de ese múltiplo y en algunos pocos, haber rebasado con significativa diferencia lo realizado por el índice, es entonces cuando nos preguntamos, fue realmente eficiente la inversión realizada; es decir, comprar el ETF y mantenerlo 5 años, en lugar de hacer un trading más activo en la búsqueda de mayores rendimientos y en plazos menores, en realidad no lo sabemos con certeza, pero la pregunta es, si el inversionista sabía que, al mantener esta inversión constante estaba, sin quererlo, decidiendo, no hacer trading activo de algunos otros valores, con el consiguiente beneficio o perjuicio que esto conlleva.
En la vida misma, el costo de oportunidad también aparece frecuentemente, pero con un matiz intangible, es decir, que no necesariamente, vemos un coste económico asociado al costo de oportunidad, aunque en el mediano o largo plazo, nuestras decisiones terminan teniendo un impacto importante en nuestra vida, o quizás más aún, cobran peso, aquellas decisiones que "dejamos" de tomar en nuestras vidas, por tomar otras. Lo importante al final del camino, es sentir que hemos tomado las decisiones correctas aunque haya un costo de oportunidad asociado, ya que es muy difícil determinar si el tomar la otra decisión, nos habría llevado a un situación de mayor bienestar o éxito profesional.
Los animo a todos a considerar siempre el costo de oportunidad en sus decisiones, sean estas de inversión o en la vida misma. Estoy seguro que el considerarlo les obligará a tomar decisiones de mayor calidad pero de mayor complejidad también. Hay algunas personas que me dicen que no pueden estar reparando en el costo de oportunidad en cada decisión que toman, algo con lo que no puedo estar mas de acuerdo, eso si, en las decisiones medulares, si que se debe tomar en cuenta. En mi caso, he tenido que lidiar con ello y ahora que ha pasado cierto tiempo, luego de haber tomado una decisión trascendental, se con claridad que es lo que hubiera ocurrido si tomaba la otra decisión, o sea que conocía con detalle todas las consecuencias asociadas antes de escoger, y eso no necesariamente me lleve a reconocer que estuve 100% acertado, simplemente que tomé un riesgo controlado, sabiendo los escenarios probables.
En síntesis, con este post, apunto a que todos tomemos decisiones mas racionales, "mas con la cabeza y menos con el corazón", es duro, pero es así, el mundo moderno nos empuja a esto y tenemos que ser lo mas competitivos posibles en el ámbito profesional y lo mas inteligentes para contribuir adecuadamente a nuestra sociedad.
En la vida misma, el costo de oportunidad también aparece frecuentemente, pero con un matiz intangible, es decir, que no necesariamente, vemos un coste económico asociado al costo de oportunidad, aunque en el mediano o largo plazo, nuestras decisiones terminan teniendo un impacto importante en nuestra vida, o quizás más aún, cobran peso, aquellas decisiones que "dejamos" de tomar en nuestras vidas, por tomar otras. Lo importante al final del camino, es sentir que hemos tomado las decisiones correctas aunque haya un costo de oportunidad asociado, ya que es muy difícil determinar si el tomar la otra decisión, nos habría llevado a un situación de mayor bienestar o éxito profesional.
Los animo a todos a considerar siempre el costo de oportunidad en sus decisiones, sean estas de inversión o en la vida misma. Estoy seguro que el considerarlo les obligará a tomar decisiones de mayor calidad pero de mayor complejidad también. Hay algunas personas que me dicen que no pueden estar reparando en el costo de oportunidad en cada decisión que toman, algo con lo que no puedo estar mas de acuerdo, eso si, en las decisiones medulares, si que se debe tomar en cuenta. En mi caso, he tenido que lidiar con ello y ahora que ha pasado cierto tiempo, luego de haber tomado una decisión trascendental, se con claridad que es lo que hubiera ocurrido si tomaba la otra decisión, o sea que conocía con detalle todas las consecuencias asociadas antes de escoger, y eso no necesariamente me lleve a reconocer que estuve 100% acertado, simplemente que tomé un riesgo controlado, sabiendo los escenarios probables.
En síntesis, con este post, apunto a que todos tomemos decisiones mas racionales, "mas con la cabeza y menos con el corazón", es duro, pero es así, el mundo moderno nos empuja a esto y tenemos que ser lo mas competitivos posibles en el ámbito profesional y lo mas inteligentes para contribuir adecuadamente a nuestra sociedad.
Les mando un abrazo.